Entre las aplicaciones de esta tecnología se encuentra la posibilidad de realizar estimaciones meteorológicas precisas gracias a sensores situados en los vehículos que envían información constantemente a las centrales meteorológicas, y la mejora de la información y seguridad vial. Esta última aplicación tiene especial interés social para reducir las dramáticas cifras de muertos por accidentes de tráfico. Gracias a las VANETs es posible alertar a los vehículos cercanos a un accidente o retención para que los conductores tomen las medidas oportunas con suficiente antelación. Del mismo modo, el conductor puede cambiar su trayectoria para evitar (y al mismo tiempo reducir) una congestión.
En cuanto a las oportunidades de diseño inteligente en este dominio, las redes VANETs son relativamente recientes y, aunque el conocimiento previo existente sobre redes inalámbricas y telefonía móvil permite que los diseños noveles funcionen, es necesario dedicarles considerables recursos en investigación para hacer la tecnología más barata, eficaz y eficiente. Es en este contexto donde podemos identificar aspectos de la tecnología que se pueden beneficiar en gran medida gracias al uso de un diseño inteligente. Algunos de ellos son los siguientes:
- Protocolos eficientes para el encaminamiento (routing) de paquetes de datos
- Optimización de protocolos de broadcasting
- Optimización del uso de energía en los dispositivos móviles
- Localización óptima de estaciones base a lo largo de la vía
- Cálculo de rutas óptimas para vehículos (problema dinámico: accidentes, congestión…)